Bueno, buenoooo ya estoy otra vez por aquí, ya se acabaron las vacaciones y toca volver a ¿la rutina? Pues seguramente sí, pero me he propuesto que no sea así, aunque seguramente acabe haciedno lo mismo de siempre, pero ya dicen que de ilusiones vive el hombre y yo puessss soy feliz así jeje.
Bueno pues a modo de resumen diré que los 20 días de vacaciones me cundieron bastante porque hice de todo...o casi. Los primeros días, tal y como había pronosticado, los pasé en familia, por fin todos reunidos jugando al UNO jeje. La verdad es que con la excusa del bautizo de mi sobrina pasé unos buenos ratos que ya echaba de menos.
Luego le llegó el turno al viaje. Por primera vez en mi vida me pasó algo curioso, cuando llegó el día de irme no tenía ganas de coger aquel avión; había pasado unos días tan contento que supongo que me resistía a que terminaran pero era inútil resistirme a aquello así que enseguida recuperé las ganas y me fui rumbo a Madrid en las que serían mis primeras vacaciones organizadas por mí. Sí, me fui solo, aprovechando que uno de mis hermanos vive allá pero a pesar de eso, una semana allí no te da tiempo a aburrirte al menos yo no: museos, palacios, parques, el metro, el cercanías, el Bernabéu, las estaciones, el final de la vuelta ciclista, el musical, copa davis, las calles... Para cualquiera que esté leyendo esto puede parecer que hablo de su día a día pero simplemente son cosas en las que me fijo y disfruto haciéndolo, cosas... ¿mundanas? jeje. En fin, que vi casi todo lo que quería, fue un punto y aparte de lo que estaba por venir.
Al regresar del viaje me encontré con una de las peores noticias que uno pueda recibir como es la muerte de alguien a quien apreciabas y el sufrimiento de una persona a la que quieres mucho, pero sobre todo, el tener que enfrentarme a una situación desconocida hasta ahora por mí, la impotencia de ver que esa persona a la que quieres lo está pasando mal y no saber cómo ayudarle... Quizás yo no sea el mejor psicólogo que existe pero opté por hacerle saber, de todas las formas posibles, que aquí me tiene para lo que sea y sobre todo, que cuente conmigo, porque su sufrimiento es el mio también. Espero que lo sepa aunque sé que no me lo dirá.
Hoy ha sido día de vuelta al trabajo, ha hecho muuucho calor (asfixiante diría yo) reencuentro con los compañeros, reconocimiento médico por sorpresa... y para que no se me hiciera tan duro el periodo post-vacacional me he comprado la Xbox 360, mi auto-regalo de reyes por adelantado jeje, ya solo falta que aprenda a manejarla, pero eso ya lo contaré más adelante.
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